Escribir cuentos no sólo estimula la creatividad, sino que también ayuda a desarrollar las habilidades de expresión escrita de los estudiantes. Al seguir las estrategias propuestas, los alumnos aprenden a estructurar sus ideas de manera coherente y a expresarlas de forma clara y efectiva.
Al hacerlo en equipos, se promueve el aprendizaje colaborativo, donde cada integrante aporta sus conocimientos y habilidades, fortaleciendo el trabajo en conjunto, el pensamiento crítico y la capacidad de resolver problemas de manera cooperativa.
La escritura de cuentos es mucho más que una actividad creativa; es una herramienta invaluable en el desarrollo integral de los estudiantes. En un mundo donde la comunicación escrita juega un papel fundamental, fomentar la habilidad de escribir cuentos desde la infancia no solo despierta la imaginación, sino que también potencia habilidades cognitivas, lingüísticas y emocionales.
Tercer año junto a su maestra Lorena Benítez @lore.benitez27